Apr 042011
 

Cuando un artista quiere introducir por primera vez su trabajo en mercado o circuito determinado, tiene que tener la suficiente habilidad para lograr en una primera etapa dos aspectos claves : lograr visibilidad y generar reconocimiento.
La visibilidad exige que seamos capaces de aprovechar al máximo todas aquellas posibilidades a nuestro alcance para que el o los públicos de nuestros interés nos vean y nos conozcan. En este sentido, es importante entender que en esta primera etapa no se puede desaprovechar ninguna oportunidad que aparezca para mostrar lo que hacemos, aunque esta no deje beneficios en términos lucrativos, pues esta es una etapa básicamente de inversión en términos de imagen.
En igual sentido y de manera muy importante, debemos lograr  que además de vernos, los públicos sean capaces de reconocernos ,y esto quiere decir ,que debemos lograr que ellos sean capaces de  identificarnos como únicos dentro del universo de  toda la competencia concurrente, lo que requiere inteligencia y oficio.
Es imprescindible que en esta primera etapa, seamos capaces de marcar por todos los medios a nuestro alcance aquellos rasgos diferenciadores que nos hacen únicos, y que desarrollemos acciones dirigidas a potenciar los mismos.
Esta reflexión exige que antes de lanzarnos a conquistar un mercado, un circuito y un público, pensemos con claridad cómo queremos ser percibidos y desarrollemos una estrategia de introducción inteligente.