Dec 032019
 

 

 

Existe una gran confusión entre los términos gerencia, administración y  dirección, por mucho que leamos al respecto, será muy difícil encontrar una definición clara de cada uno de estos términos.

Gerenciar es un proceso totalmente creativo, que implica talento, racionalidad y habilidades en altas dosis, y para un buen gerente, nunca dos situaciones son iguales, ni dos soluciones iguales. El pensamiento gerencial contemporáneo, constituye una mirada totalmente dialéctica del mundo que nos rodea, donde la capacidad de cambiar, y aprender, se establecen como premisas de partida de cualquier enfoque.

La gerencia es ante todo una función, y si tuviera que definirla, a partir de toda la bibliografía consultada, diría que la Gerencia es, entre otras cosas, las siguientes:

  • El arte de hacer que las cosas se hagan.
  • Es la capacidad para diseñar, crear y hacer funcionar un sistema  como un” conjunto auténtico”.
  • Es una capacidad de organización interna que permite que cualquier entidad, no importa cual sea su naturaleza, obtenga los fines que se propone con una mayor eficiencia.
  • Es un medio para lograr un fin, (no necesariamente lucrativo) y no un fin en sí mismo.
  • Es un conjunto de habilidades comunicables y aprendibles
  • Es la capacidad para convertir problemas en oportunidades.

En estas definiciones he destacado una serie de conceptos claves que quisiera ampliar a los lectores.

  • ArteGerenciar exige una creatividad muy grande. Nunca dos acciones, proyectos u organizaciones van a ser iguales. Cada acción, cada proyecto, y cada organización, va a demandar un diseño de gestión particular y único que es dialéctico, y que va a exigir una capacidad de respuesta creativa y rápida de sus gestores para lograr los objetivos que se persiguen y lograr mantenerse en permanente relación con un entorno también cambiante
  • Sistema.Gerenciar implica visión en sistema, y se entiende por sistema: cualquier conjunto de elementos relacionados entre sí con el objetivo de  cumplir con una función determinada. Todo proyecto u organización tiene que funcionar en perfecta sintonía como un sistema auténtico, y esto es muy difícil de lograr. En la naturaleza, los sistemas funcionan perfectamente, y cuando uno de sus elementos se desajusta el resto se afecta. Pensemos en el sistema solar, el ecosistema, el sistema circulatorio o el respiratorio. Esto, que en la naturaleza se da tan claramente, resulta para el hombre muy difícil de lograr. Entre los elementos que deben tenerse en cuenta al diseñar un sistema se encuentran los siguientes:
  •  Jerarquía. Es casi seguro, que nuestro sistema va a estar dentro de otro sistema mayor, por lo que no podemos perder de vista que estamos insertos dentro de un contexto dado que puede tener uno o más sistemas por encima de nosotros. Desconocer esto puede resultar fatal para nuestros propósitos.
  • Tenemos que ser capaces de diseñar como se va a producir el encadenamiento entre las partes componentes de nuestro sistema en relación con 2 variables: autoridad e información.
  • Coordinación: Tenemos que ser capaces de crear una coordinación eficiente a partir del desarrollo de canales de comunicación entre las personas que realizan diferentes trabajos. Sin coordinación, los individuos pierden de vista sus funciones en el seno del sistema, se enfocan en intereses específicos, y comienzan a trabajar ajenos a las metas generales.
  • Límite. Es preciso conocer los límites de nuestro sistema con relación al ambiente que nos rodea, para no salirnos de nuestra área de dominio.
  • Cualquier sistema exige un control de su funcionamiento para mantenernos en línea, detectar y corregir errores y no perder el rumbo. El control exige la creación de mecanismos para poder lograrlo.
  • Retroalimentación. Cualquier sistema que no se retroalimente muere. Resulta imprescindible oír y saber leer e interpretar las señales que nos emite el entorno y los diferentes públicos acerca de nuestra gestión, para poder introducir cambios y ajustes en nuestro sistema.
  • CAPACIDAD DE ORGANIZACIÓN INTERNA Esta capacidad está dada, por la habilidad para diseñar planes donde se articule el pensamiento estratégico con el táctico.
  • MEDIO Las funciones gerenciales son una “caja de herramientas” encaminadas a ser utilizadas para el logro de un fin en concreto. La gerencia no es por si misma un fin. Podemos ser gerentes y no saber gerenciar.
  • HABILIDADES Los enfoques y habilidades gerenciales son trasmisibles y pueden ser enseñados, pero esto no garantiza como receta un éxito. El éxito dependerá en mucho de la calidad y valores de nuestra propuesta y de nuestro talento y habilidades para trabajar la misma y aplicar lo aprendido.
  • CONVERTIR PROBLEMAS EN OPORTUNIDADES. Este es uno de los rasgos fundamentales del ejercicio gerencial. Se dice que si no hay problemas no hay oportunidades, y un buen gerente, en sintonía con su entorno, y con una capacidad desarrollada para diseñar estrategias saca provecho de cualquier problema. Esta es una habilidad observable en los grandes estrategas en cualquier esfera de actividad.

Los enfoques gerenciales, pueden servir para  alcanzar  beneficios pre fijados, con un mayor impacto y con un  menor costo (humano, de recursos materiales o de recursos  económicos).

Por su probada efectividad, desde la década del 60 los enfoques gerenciales empresariales se han trasladado a todo tipo de actividad.

En este proceso, tendremos que ser capaces de combinar lo “general” de los enfoques gerenciales, con lo “específico” de nuestro trabajo, ya que la gerencia nos ofrece un repertorio de maneras de enfrentar la realidad, que nos permite articular nuestras capacidades internas para:

  • Producir un pensamiento estratégico
  • Diseñar proyectos
  • Instrumentarlos
  • Realizarlos
  • Evaluarlos
  • Hacerlos rentables en términos de impacto.