Apr 082014
 

En cualquier gestión de marketing de un producto artístico, estos cuatro conceptos están íntimamente relacionados a pesar de tener matices diferentes y ser estudiados por diferentes disciplinas.

El punto de partida, la imagen de marca, es objeto de estudio de la estética y sobre la misma existen aproximaciones e interpretaciones completamente diferentes. Cada autor selecciona aquella que satisface en mayor grado sus expectativas pero sin duda alguna constituye el punto de partida de cualquier proceso de gestión, pues sin producto artístico e imagen artística no hay nada.

Ahora bien, el objetivo del marketing es convertir esa imagen artística en imagen de marca, que es unacategoría totalmente diferente a la primera, aún y cuando la incluye, pero cuya construcción requiere de habilidades y conocimientos particulares para poder generarla y posicionarla con eficiencia en la mente de los públicos.

Este proceso pasa necesariamente por la identidad del producto la cual hay que construirla en su condición de marca lo cual requiere también determinadas habilidades y conocimientos que se aprenden. Es importante destacar que cuando un producto tiene una imagen artística sólida la  construcción de su identidad como marca es mucho mas fácil de desarrollar que cuando estamos trabajando con producciones cuyas imágenes artísticas son pobres.

Todo este proceso apunta a lograr un posicionamiento adecuado en la mente de nuestros públicos y todo esto se aprende a hacer. La batalla del mercado se gana no en los puntos de venta, sino en la mente de los públicos y ahí es a donde tenemos que llegar.