Dando continuidad al tema del valor de las comunicaciones personales para el mercadeo de nuestro trabajo,les adjunto testimonio que puede resultar interesante para todos y que corrobora todo lo que he dicho con anterioridad.
“Si estamos pensando en comunicación como soporte para la circulación del arte, o para facilitar la obra de arte, hay que pensar que hay que desarrollar distintas estrategias de comunicación, y una imprescindible, desde mi experiencia profesional, es la comunicación interpersonal. Esta es una estrategia vital.
La gente no trabaja con instituciones. La gente trabaja con personas. Las personas se relacionan entre sí y desde esas relaciones se buscan los apoyos con instituciones. A través de esas instituciones uno encuentra a otras personas. Las instituciones no son edificios, son organismos vivos en los cuales influye la subjetividad de los individuos que en ellas trabajan; en la medida en que seduces, conduces, apoyas o generas propuestas creativas, los procesos y las gestiones toman uno u otro rumbo.
Cuando uno se da cuenta que puede contar con una persona que te puede abrir opciones para el intercambio, uno tiene que aportar a esa relación, porque el intercambio se da entre dos partes. Puede ocurrir que logres establecer una buena relación con una persona, pero esa no sea la que le pueda dar continuidad a tu gestión, pero no importa, ahí la tienes y quizás te sirva para recomendarte a alguien o para advertirte de una nueva posibilidad. Uno tiene que priorizar a quien se va a acercar y sobre todo acercarte con dignidad, porque al fin y al cabo, hay espacio para todos y el problema es encontrar cual se corresponde con tu propuesta.”
Eberto García Abreu
Teatrólogo, Crítico, Investigador y Profesor teatral